Esta exquisita propiedad, situada en medio de la naturaleza mallorquina, cerca de la costa noreste, es la experiencia perfecta para cualquiera que busque la paz y la armonía de un entorno rústico. Con la ciudad de Palma a sólo 50 minutos, la ubicación es perfecta para aquellos que quieren sumergirse en la naturaleza de la isla de una manera mucho más exclusiva. Los pintorescos pueblos de Manacor y Son Serra de Marina, las playas de arena virgen y el pueblo pesquero, están a 15 minutos en coche, este perfecto oasis situado en una zona desértica de Mallorca crea una atmósfera increíble con su exuberante vegetación y algunos estanques y fuentes de agua.
La villa tiene una exquisita decoración con un estilo fresco que combina lo autóctono con lo moderno. El interior es un museo de arte moderno en cada esquina. Cada luminoso dormitorio tiene su propio baño privado unido a una terraza. El solarium y la piscina son el espacio perfecto para vivir el verano mallorquín. La casa también tiene una elegante sala de estar interior, una moderna cocina totalmente equipada y un tranquilo estudio.